domingo, 16 de febrero de 2014

¿Y CONGA VA O NO VA?



                                  
            
EL PROYECTO MINERO CONGA

Los últimos acontecimientos acaecidos en la región Cajamarca, relacionados con la viabilidad y ejecución del proyecto minero Conga han puesto en jaque al gobierno de Humala, puesto que el estudio de impacto ambiental que daba luz verde al mencionado proyecto ha tenido una serie de observaciones que ha desacreditado su validez. Este hecho ha originado el descontento de un numeroso grupo de cajamarquinos quienes han salido a las calles para expresar su disconformidad, mediante la protesta en distintas ciudades de la región. Dadas las circunstancias, un sector, sobre todo, los denominados ambientalistas, cree que este proyecto debe declararse inviable, porque atentaría contra el recurso hídrico, al afectarse las cabeceras de cuenca; en cambio, para otro sector, en especial para los empresarios, cree que esto debe seguir su curso, porque está en juego el movimiento económico de la región y del país. Ante esta disyuntiva, asumo que el millonario proyecto debe seguir su curso.

Por un lado, digo que el proyecto minero Conga debe ejecutarse, porque genera diversos beneficios para el país. En primer lugar, genera puestos de trabajo y mejora la calidad de vida de muchas familias. En segundo lugar, gran parte del canon minero está destinado a la ejecución de proyectos que benefician a todos. En tercer lugar, parte de ese impuesto sirve para que el estado cumpla la deuda interna del país. Por último, el hecho de que Cajamarca reciba canon minero no significa que esté destinado solo para un grupo de personas; por el contrario, el canon minero es la participación efectiva y adecuada de la que gozan los Gobiernos Locales y Regionales producto de la explotación económica de los recursos mineros.

Por otro lado, en términos del MEF, desde el 2006 se ha permitido que las dependencias regionales y locales utilicen hasta el 20% de los recursos provenientes del Canon para el mantenimiento de la infraestructura generada por los proyectos de impacto regional y local. Asimismo, el ente afirma que el gobierno central dispuso que se destine hasta el 5% de lo recibido para financiar la elaboración de perfiles correspondientes a los proyectos de inversión pública que se enmarquen en los respectivos planes de desarrollo concertado. En suma, con todo lo que se proyecta, en términos económicos, se estima un avance significativo para la región. Empero, todos estos beneficios se recortarían si desestimamos el millonario proyecto.

Además, según la Sociedad Nacional de Minería Petróleo y Energía, a través de su reporte informativo sobre transferencia de Canon Minero, informa que en julio de 2012 se destinó una partida de 512 millones de soles y unos 300 millones, aproximadamente, en el 2013 a la región Cajamarca. Con estos montos se asume que las autoridades locales y regionales, de manera conjunta, han ejecutado una serie de obras públicas; caso contrario, habría que preguntarles qué han hecho con semejantes sumas de dinero. Ahora bien, si las autoridades no canalizaron de manera adecuada los recursos o simplemente se lo devolvieron al fisco por incapacidad de gasto, es un tema que la misma ciudadanía debe mantenerse vigilante ante tal incongruencia para hacer sentir su disconformidad.  

Es importante recordar que, desde la época colonial, el Perú se ha caracterizado como un país minero. Desde entonces, gran parte de nuestra economía se ha dinamizado en función a los ingresos producto de esta actividad. Es por eso que actualmente, hay varios proyectos de esta naturaleza que están esperando el reinicio de sus actividades, paralizadas como consecuencia de los reclamos sociales ante el temor de mermar las fuentes acuíferas que se ubican en cabeceras de cuenca. Pese a los temores, la experiencia nos dice que la mayoría de proyectos mineros han terminado ejecutándose y beneficiando a numerosas familias, directa o indirectamente; y este no sería la excepción.



Para finalizar, reitero que este proyecto minero Conga debe ejecutarse, ya que resulta positivo para el país. De hecho, esto será una realidad en la media en que las autoridades que reciben el presupuesto del canon minero tengan la capacidad de generar proyectos de gran impacto en beneficio de todos; caso contrario, resulta desventajoso el hecho de recibir grandes partidas presupuestales que no se puedan invertir, menos aún generar el verdadero desarrollo que tanto anhelamos. Finalmente, pese a todos los beneficios que pueda generar este proyecto, es menester que se explique a la ciudadanía cuál será el verdadero impacto y cuáles serán las medidas que se tomarán para no alterar el equilibrio ecológico.